DONDE ESTÁ EL PILOTO

Y ¿DÓNDE ESTÁ EL PILOTO? ¿Recuerdan aquella gustada serie televisiva, en donde los héroes, el muchacho chicho y la bella azafata, combaten con un grupo de terroristas (musulmanes, por supuesto) que asesina a los pilotos que disponen a estrellar el avión en algún lugar importante (la Casa Blanca de EUA o algo peor)? Penosamente, amigos. Así estamos en la actualidad en México. Muestro “Piloto” chofer, timonel, director de orquesta o Técnico de futbol. ¡No sabemos dónde anda! ¿Qué Jijos está haciendo con nuestro querido País? Porque seguramente ustedes ya saben, para conducir un país del tamaño e importancia de México. Se necesita (¿una escalera grande y otra…?). Más bien una persona (ojalá fuera una Dama, de ésas de deveras). Un individuo(a), que tenga cuando menos una educación universitaria un título de abogado, con conocimientos en economía, de preferencia un postgrado, que domine cuando menos dos idiomas internacionales (no incluír alguno de los apreciados dialectos aborígenes tan amados -PYSQ-, por yá saben quién). Ustedes seguramente conocen el problema. El novedoso partido de las multitudes y su carismático líder, se asemejan extraordinariamente al Partido de la Revolución, que fundara Don Plutarco Elías Calles que de ése modo, se apoderó del país por casi ochenta años! No es broma. Los que vivimos ésas épocas, lo sufrimos continuamente hasta que Vicente Fox, nos regaló, la democracia, el federalismo, el voto libre, la división de poderes, la libertad de decidir a quién quiere el pueblo en la silla presidencial. En cambio, ahora tal parece que vivimos en los 40´s, 50’s 60’s, 70’s 80’s y 90’s. Pero, no todo es negro amigos, creo que todavía quedan personas que no tienen la memoria totalmente destruída. Algo se puede hacer, por lo pronto hay que reflexionar seriamente en unión de quienes más apreciamos y tomar las mejores decisiones, para contribuir al reemplazo de los que están encaramados actualmente e n el poder. Necesitamos un buen Presidente. Porque el actual, sólo mira hacia el pasado, ansía las épocas de Benito Juárez, o de Don Venus, o de Don Plutarco. Conduce nuestro avión o autobús, o carreta. Con los ojos pegados al espejo retrovisor. No ve el futuro, está obsesionado con su famosa 4ª Transformación, quiere “trasnformarnos”, ¿En qué? En una República Juarista de corte socialista. Y vean ustedes ¿A dónde conduce eso?. Algo semejante a los países “hermanos”, como Cuba, Venezuela, o Nicaragua, para nombrar solo algunos. De modo que no queda más remedio, que unirnos (la Unión hace la Fuerza), y buscar afanosamente, en serio, nos va el futuro de uestras familias y de nuestroi querido País.