viernes, 17 de abril de 2020

PANDEMIA, PARANOIA Y PAENDEJEMIA




PANDEMIA, PARANOIA Y PENDE...MIA

Tiempos de pánico, incertidumbre y angustia. Cuidado porque cualquiera de éstas condiciones podría ser peor que la propia enfermedad que ocupa la casi totalidad de las noticias y actividades nacionales y personales. Miedo, estrés y angustia nos pueden matar más rápidamente que el virus.
Es pues preciso analizar esta amenaza con la cabeza fría y tratar de salir un poco de la avalancha noticiosa gubernamental y social. No seré yo la autoridad que exprese tal sabiduría, (quién soy yo para dar consejos). Pero ahí les va mi opinión:
La pandemia del SARS2 COVID 19 es una mutación de la familia de virus respiratorios que estan haciendonos la vida imposible en más de un sentido, es muy contagioso, (igual que cualquier gripe o catarro, sarampión rubeola o varicela), su peligrosidad estriba en que tiene predilección por el aparato respiratorio y se mete hasta lo más profundo causando Neumonitis intersticial inflamación del espacio entre los capilares y los alveólos es decir Neumonía Atípica, inflamación pulmonar que obstaculiza la entrada de oxígeno al nuestro organismo que es frecuentemente mortal.
Los virus son partículas de RNA (ácidoribonucleico, que existe en los cromosomas de todas las células vivas), esto no quiere decir que en todas las células vivas hay virus, sino que los virus sólo pueden existir dentro de los núcleos de las células, de hecho los virus no están estrictamente “vivos”, ya que no tienen metabolismo, no respiran, lo único que hacen es reproducirse y se replican utilizando las proteinas de las células y lo hacen con singular alegría exponecialmente es decir por un factor de 10-2 que es lo que hacen todas las células embrionarias de los organismos, primero para desarrollarse y luego para combatir el envejecimento, lo mismo hacen las células cancerosas, pero mucho más lentamente.
Él coronavirus humano HCOV-OC43 está compuesto de partículas de RNA de 120 a 160 nm-nanomicrones- (nano= una millonésima parte de una micra y una micra es 1/1000 milímetro) con una cubierta lipotroteíca y prolongaciones en forma de pétalo que les da su característico aspecto en el microscopio electrónico. Los virus sólo se pueden cultivar en células vivas como el embrión de pollo y sólo pueden replicarse dentro de los núcleos de las células.
Su contagiosidad y peligrosidad estriba en que no se conoce vacuna ni tratamiento específico y en que su periodo de incubación, es decir desde el contagio hasta la aparición de los 1os síntomas varía de 10-15 días, lo cual determina que existan muchos “portadores” sanos o asintomáticos que pueden contagiar a las personas suceptibles. La severidad del cuadro clínico es mayor en adultos jóvenes y mayores y se conocen pocos casos en niños y adolescentes. Se teoriza que la razón de ésta discrepancia es el hecho de que los jóvenes han recibido múltiples esquemas de vacunación y tienen un sistema inmunológico más joven y resistente, lo mismo se puede pensar de las personas con enfermedades autoinmunes como el Lupus-ES, Artritis Reumatoide y otras enfermedades alérgicas, que parecen ser más resistentes.
Como quiera que sea estamos metidos en la peor pandemia desde la Gran Influenza Española después de la 1a Guerra Mundial (+de 400 millones de muertes) y estamos tan desarmados como en 1918. No tenemos vacuna ni antivirales específicos. La Ciencia Médica y la tecnología moderna sin embargo nos permite defendernos mejor. Pero estamos metidos en un verdadero tsunami de información, medias verdades, mitos y crasas tonterías. No seré yó quien ilumine a la humanidad, pero creo que algo de sentido común podría ayudar:
1.- La “Sana Distancia” es un buen consejo, mientras más nos alejemos de los potenciales contagios menos riesgo, sin embargo hay que considerar que las consecuencias de exagerar en ése sentido podrían ser más dañinas para la economía del país y provocar una crisis humanitaria prolongada y severa y ocasionar más daño a la salud, más crimen, homicidios, escasez, hambre y sufrimiento a la población. El consejo es; “ni tan-tan, ni muy-muy”, porque así es todo en la vida, mucho de una buena cosa (como el agua), puede ser catastrófico y mortal.
2.- El “Cubrebocas” o mascarilla. También una excelente idea, más vieja que Matusalén, se empleó en todas la epidemias que el Mundo ha padecido, (aunque haya voces discrepantes, sorprendentemente del Sector Salud (SbSP López Gatell). Es obvio que es una barrera especialmente eficaz para evitar la contaminación vía aérea. Se trata de un virus respiratorio, la vía de transmisión es la nasofaringe. El virus no está volando en el aire, sólo es activo en las células humanas presentes en las gotículas de moco o saliva de nuestro aliento, tos o estornudo, las personas al respirar (inhalar-exhalar) somos el vector natural. El cubrebocas es nuestra mejor arma y debería ser obligatorio en tiempos de epidemia para sanos, enfermos, convalescientes y en condiciones de socialización, debería cubrir boca y nariz, ser cómodo, no impedir la respiración ni el habla, cambiarlo cuando se humedezca, podría ser de tela o material sintético con poros no mayores de 2 micras y si el material resiste podría ser lavable y reutilizable, no necesita “filtros” especiales, excepto para personal de salud en condiciones intensivas.
3.- Los reflejos de estornudo o tos, el moco y la saliva, son mecanimos naturales que nos defienden de todo tipo de agentes patógenos y están presentes aún en ausencia de enfermedades, es un error suprimirlos, pero sólo pueden ser eficaces cuando la hidratación es óptima. La recomendación estrella del Dr Gatell de toser o estornudar en el pliege del codo (“estornudo de etiqueta”), es francamente una porquería, cualquiera que lo haya hecho notará que no bloquea el flujo de moco, sino que lo deposita en la manga de la camisa o en la piel y trate usted de lavar su codo o camisa con la otra mano (puaff!) Es mucho mejor estornudar o toser en un pañuelo (que para éso son), o en el hueco de ambas manos, sonarse, limpiar la nariz y luego lavarse las manos y cara con agua jabón y desinfectante.
4.-Las medidas de higiene deben seguirse escrupulosamente, el mejor desinfectante es el alcohol etílico o isopropílico al 96%, pero tener cuidado con los ojos, no estar cerca del fuego y lejos de los niños, el alcohol en gel es una cochinada, deja las manos y superficies pegajosas al secarse y se adhiere a todo tipo de superficies y polvo, hay que lavarse después de usarlo, los desinfectantes a base de cationes iónicos o aniónicos, como la mayoría en el mercado, también son eficaces. No se deben usar substancias caústicas como cloro, Yodo o vinagre.
5. Utilizar el poder desinfectante del sol (nuestro amigo), la radiación ultravioleta mata bacterias, hongos y neutraliza los virus. Desde hace mucho, el tratamento de la peritonitis purulenta de cualquier tipo incluía exponer las vísceras al sol, también se utiliza en los quirófanos y unidades neonatales, zonas de aislamiento y para potabilizar agua.
Reflexionemos como se distribuye la pandemia mayoritariamente en países nórdicos con escasa exposición al sol, ciudades sobrepobladas y con edificios altos (los rascacielos de NYC). Es recomendable asolearse, hacer ejercicio físico aeróbico, cantar, bailar, conversar, utilizar el humor y escuchar música.
6.-El virus como toda cosa biológica está sujeto a las leyes naturales, todo nace crece, se desarrolla, reproduce y muere. Las células mueren de dos maneras; por Necrosis cuando les faltan nutrientes, oxígeno, agua, o por Apoptosis o envejecimento es decir; muerte natural cuando llega al límite genético de replicarse (El Límite de Hayflick), cuando se agota la capacidad de efectuar mitosis binarias las células envejecen y mueren. De hecho todas nuestras células están envejececiendo lentamente y muriendo, las de la piel duran 7días, la sangre 1mes, los huesos, tejidos especializados un poco más. Los virus y toda cosa viva siguien las mismas reglas. Cuando éste coronavirus llege a su límite de Hayflick, envejecerá y morirá (espero que nosotros no muramos antes). No sabemos cual es su límite, pero si se comporta como en Wuhan China, esto ocurrirá aproximadamente en 3 meses. Para entonces probablemente, ya no estaré con ustedes (soy población vulnerable +85 años), de modo que de una vez les digo adiós y buena suerte.