SE QUE ESTOY ARRIESGANDO MI PELLEJO, PERO A VER QUE OPINAN DE ÉSTO:
¿CUÁNTOS
MÁS, MUERTOS? (IV)
Amigos:
Cuántas más muertes
vamos a aguantar por una absurda locura internacional
que irónicamente “Para proteger a nuestros niños y jóvenes”,
vamos a sostener y a pagar -como sociedad-, económicamente
y con centenas de miles
de muertos un buen número
de éllos
inocentes? Muchos
policías, soldados, niños, curiosos, etc.
Y
¿Porqué digo; ¿Cuántos
más muertos? Pues por la sencilla razón de que la mayoría son del
sexo masculino.. Hace cuatro años vengo neceando con este artículo
(éste es el 4o),
y
me da´pena informarles que; ¡No ha cambiado nada! Sigue la misma
historia. En prácticamente todos los países “desarrollados” o
nó, la misma filosofía reina: “Las drogas son substacias
dañinas, por éso estarán prohibidas”. Y me perdonarán los más
iluminados y conocedores del tema, pero existen cientos de miles
(¿millones?) de substancias dañinas tóxicas o no, que consumimos a
diario, ¿Porqué?, pues porque la toxicidad de una substancia es
función
de cuatro
factores:
La naturaleza de la substancia, la
cantidad, su
concentración y la suceptibilidad de la persona expuesta. Por
ejemplo:
El
agua (El Agua Es Vida” ¿Nó?), cuando escasea podemos morir, pero
cuando es demasiada, ¡también!
¿Cuántas personas se ahogan cada año? Probablemente más que las
que se mueren por “drogas”. Lo mismo podemos decir del oxígeno,
de la sal, del azúcar,
del alcohol, del tabaco, de la carne, de la tortilla, del chile, de
los frijoles, de lo que sea. Si no me lo creen; a ver ¡cómanse 10
Kg de frijoles!, o 10 kilos de tortillas!
(y ni siquiera es
necesario mezclarlos).
Ahora,
veamos: La primera función de un “Estado”, es decir “Gobierno
Constituído Legalmente”,
es la de PROTEGER A SUS HABITANTES, es decir; su integridad física,
su salud, su capacidad de sobrevivir, (hacer por la vida), la
paz y la armonía de las personas.
Sin embargo; Lo que
observamos en estas “Políticas Públicas de Combate Frontal a la
Delincuencia”, es un inmenso (y sumamente costoso) esfuerzo para
prohibir el consumo, aprehender o matar a los criminales que se
dedican a ésto, y
combatir la producción, transporte, comercialización y consumo de
cualquier substancia considerada “Droga” o “Enervante”.
(Algunos
más iluminados las denominan; substancias “psicoactivas”).
Sin
embargo, éso engloba muchas substancias que consuminos a diario;
¿qué les parece un “cafecito” tres o cuatro veces al día?, o
unas cuantas Coca-Colas?, unos cigarritos?, ¿un tequlita de vez en
cuando? Y que hay de todo lo que ingerimos aujnque no sea
“psicoactivo”, como un taco de carnitas (¿de lengua mejor?), una
sopa de médula, o de birria (ya se me hizo “agua la boca”). El
colesterol mata casi 40
mil mexicanos ¡al año! El alcohol 50 mil, los automotores, ¡El
doble! Y ...¿Están prohibidos?
¿Queremos
proteger a nuestros niños y jóvenes? (“El Futuro de la Patria”);
¿De qué se mueren los niños?: Antes de los dos años de
enfermedades infeciosas y congénitas, después, de accidentes
(imprudencias de padres y chamacos). Y el resto de la población?
Pues de muchísimas cosas; Accidentes, Enfermedades, Cáncer,
Cardiovasculares, Diabetes. Pero ¿por abuso de substancias? Pues no
sé, pero sospecho que mucho muy pocas ( a ver tráiganme las
estadísticas).
Yo
creo que el Estado, ¡No tiene ninguna obligación de decirle a una
persona en uso de sus facultades mentales, qué es lo que debe
consumir, o nó! Ahora que si todos los habitantes somos débiles
mentales o niños inocentes, bueno pues ahí sí que el gobierno nos
diga (y nos dé), que comer, beber, respirar, y hacer en todo
sentido, por nuestro propio bien, ya que todos somos incapaces de
sobrevivir, y el Estado considera ¡que somos menores de edad o
tarados
mentales!
Y
amigos. Vicente Fox y un buen de personas intelectuales,
estadistas, políticos, médicos sabios, conocedoras del problema
(entre éllos Premios Nóbel y ex-presidentes), ¡TIENEN RAZÓN!
La
prohibición es una tontería. Es absurda y contraproducente. Como
la experiencia enseña, no es necesario ser un experto, para ver que
si seguimos con una práctica y obtenemos un resultado perjudicial, y
la volvemos a practicar y obtenemos una y otra vez los mismos
resultados adversos, pues resulta evidente que tal acción, receta,
política o conducta, ¡NO ESTÁ FUNCIONANDO!! Es más, los
resultados son cada vez peores y más perjudiciales, costosísmos
en términos de vidas y economía. Pero que le vamos a hacer, el
mundo parece convencido de que “Las Drogas son el Enemigo a
Vencer”.
Y
Amigos, el enemigo ¡Es la ESTUPIDEZ!.
(Con
el debido respeto)..... Doccis, 26 Julio, 2013
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