HOY ME PLACE PONER A SU CONSIDERACIÓN UNA PEQUEÑA SERIE DE
ARTÍCULOS DISEÑADOS SOBRETODO PARA LA "GENTE JOVEN", ES DECIR PARA LOS
"PEQUES", "PROLE", "MORROS", "BUQUIS", "CHAVIZA", "PAPOOSES", ETC.
SI USTED NO CALIFICA PARA ESAS CATEGORÍAS, PUEDE OPTAR POR:
1.-IGNORARLOS Y PASAR AL SIGUIENTE ARTÍCULO.
2.-LEERLOS Y REÍRSE DE MI INGENUIDAD DE PENSAR QUE LOS JÓVENES IGNORAN EL TEMA.
3.- REÍRSE DE TODO Y A LO MEJOR APRENDER ALGO.
4.- AGREGAR SU COMENTARIO,(Y ASÍ TODOS APRENDEMOS).
LA
MADURACIÓN SEXUAL DE LA PAREJA HUMANA
“Será largo
el crepúsculo, Ya va creciendo el día,
Los
rumores diurnos huyen y se dispersan
Sorprendidos
los árboles no ven llegar la noche,
Siguen
despiertos en la tarde blanca,
Y
piensan...”
(
Condesa Mathieu de Noailles, 1877)
La diferenciación sexual en el ser
humano se inicia, desde los primeros momentos de la concepción, es
en ése crucial momento, que se establece el sexo cromosómico, el
heterogamético(XY) o masculino y el homogamético(XX) o femenino.
Esta diferenciación está controlada, exclusivamente por el padre,
ya que solo éste posee cromosomas “Y”, en los núcleos de sus
espermatocitos. El gametocito femenino (óvulo), tiene conformación
de dos cromosomas completos o sea XX . Y cuando un espermatocito
(célula masculina) madura, se divide en dos dejando así una célula
con cromosoma “X” y otra con”Y”. Por lo que es absolutamente
casual si uno de éstos se une a un óvulo maduro que sólo tiene
cromosomas“X”, resultando aleatoriamente un embrión femenino
(XX) o masculino (XY). Estos benditos cromosomas, son en realidad
pequeñas estructuras de cromatina, una substancia compuesta de ácido
ribonucleico (ADN), secuencial y ácido desoxirribonucleico (ADRN),
que son proteínas unidas en espiral y que contienen toda la
información genética necesaria para el desarrollo de un ser humano
completo en toda su complejidad. Los “genes” son pequeñas
partículas de éstos cromosomas y son específicos de cada
característica somática humana y rigen su comportamiento futuro.
¿Suena complicado? Bueno en realidad
es menos complicado decirlo que hacerlo y comprenderlo a cabalidad.
Pero ahí está encerrado el maravilloso misterio de la vida.
Es ciertamente
admirable el mecanismo de la transmisión de la vida, y eso es así
hasta con la más humilde criatura viviente, (una profunda reverencia
“an`a
tip of my hat”,
hacia la magnificiencia de nuestro Creador).
Y esto es solamente el principio; se
inicia la vida nueva de un ser humano, falta muchísimo camino que
recorrer, todo su desarrollo como embrión ya diferenciado
sexualmente, después como feto humano, y finalmente el neonato
pataleante y vibrante nos ensordece a berridos y nos llena de ternura
hasta las lágrimas (no sé porqué si somos tan machos).
Se ha quitado un poco la maravilla de
la expectancia acerca de ¿qué será?, con el advenimiento de la
Ecosonografía Obstétrica, que es capaz de decirnos con algún grado
de certeza el sexo del nuevo visitante del planeta (pero de que se
equivocan, se equivocan, como de que no). La manera de como lo
predicen, es absolutamente simple; maniobran la sonda (o
transductor), sobre el abdomen de la madre hasta que el escuincle,
molesto, se voltea hacia delante, flexiona las piernitas y muestra
retador los genitales desafiantes al médico y espectadores, acto que
los médicos denominan; “mostrar sus credenciales”, algunos
inclusive (los varoncitos por supuesto), cierran el puño de la mano
y ¡despliegan el dedo medio insolentemente!
La maduración sexual del ser humano,
al principio casi imperceptible por 10 o 12 años, se desencadena
explosivamente en la pubertad, los primeros indicios, son apenas
perceptibles, algunas variaciones en la disposición
músculo-esquelética, aparición leve del vello axilar y genital,
desarrollo de la laringe y cartílago tiroides en los varoncitos (con
la voz de “pito” y luego de sargento resultante), el crecimiento
de los genitales y características sexuales secundarias; mamas,
caderas, hombros, huesos, músculos, disposición del vello o barba
etc. se sucede y asombra y preocupa a los “pibes”, pero la
aparición de la menstruación realmente escandaliza a las pequeñas
y las envía súbitamente hacia los horrores y maravillas de la
“womanhood”, (benditas sean).
¿Quién no conoce y ha sufrido en
carne propia y ajena los estragos de la adolescencia? ¡Qué época
señores! Más nos valdría entrar en una licuadora y salir en un
huracán pasional, con los tímpanos a punto de reventar! Pero “bear
with me please”, no tocaremos mucho ésta maravillosa época de
nuestra juventud, excepto para recomendar paciencia, dosis extra de
tolerancia y simpatía por ésas maravillas de energía discordante,
desafiante y trastorno mental transitorio que es la adolescencia
humana.
La pareja humana
está prácticamente lista, completamente desarrollada sexualmente y
capaz de reproducirse mucho antes de alcanzar la madurez corporal y
sobretodo mental y eso es realmente un serio problema, porque los
“zoquetes” y atolondrados muchachos, enloquecidos por la
explosión hormonal que desencadena su maduración sexual, entran y
salen “en celo”(o “brama”), con pasmosa facilidad y si no
fuera por nosotros los dizque más maduros, la explosión demográfica
haría palidecer a los lepóridus
cuniculus (conejos),
y la humanidad se hubiera destruido
así misma hace mucho tiempo. Dicen que la “Juventud es “una
enfermedad mental que se cura con los años”.
¿Será cierto
esto?. No lo sé, pero lo que si sé, es que dura muy poco, es
apenas una brisa vigorosa y optimista, que ilumina nuestra existencia
por unos pocos años. ¿Qué tantos?,; pues mentiría si dijera lo
que todos deseamos, la manera de permanecer siempre jóvenes, aunque
sea en espíritu o de “corazón jóvenes”. Por cierto esto último
no es imposible, sostengo yo, es cuestión de mentalizarse y ponerse
e a trabajar en el intento de acostumbrarse a pensar
optimísticamente, (aunque todo parezca negro y terrible), también
ayuda el nunca perder la natural curiosidad por lo que nos rodea,
evitar la natural apatía de nosotros los viejos, nunca perder la
capacidad de asombro, acostumbrarnos a ver el lado amable de las
cosas que nos pasan, hasta las peores cosas de la vida conllevan
algún aspecto cómico, bueno o enseñanza valiosa, ¡busquémoslas!
Si nos fijamos, todas las nubes de tormenta, cuando ésta amaina,
tienen un borde plateado, “look
for the silver linning”,
decía con su hermosa voz, la talentosísima Judy Garland .
Bien, la maduración sexual, no tiene
mucho que ver con lo anterior, pero si con la maduración emocional,
que es consecuencia natural de la primera.
En el mundo moderno actual (en mi
opinión), se le dá demasiada importancia a el sexo, ¡sexo!, sexo,
sexo!, por todos lados. Es el comercializador mayor, el más
prevalente, a veces el único!. ¡Qué enfado!, sobre todo cuando
nosotros, ya estamos prácticamente fuera de la jugada. Aunque por
todos lados, los “comunicadores”y “sexólogos”. ¿Qué será
eso de sexólogos?, de verdad a éso dedican sus afanes
profesionales?,. ¿de veras los necesitamos para que nos “orienten”,
sobre ¿Cómo realizarlo?, para que nos digan ¿cómo y donde están
nuestras “zonas erógenas”, “punto “G”y demás zarandajas,
cuáles son las técnicas sexuales más adecuadas y como podremos
tener una “vida sexual más plena”?. ¡Por favor señores!, más
seriedad!, yo les sugeriría buscar una ocupación más útil y
productiva (aunque productiva, la actividad sexual y toda la
literatura adyacente, de veras es lucrativa!). Pero, ¿no es cierto
que estamos inundados de sexo?, En realidad es el dios moderno, que
junto con el dios dinero, rigen al mundo. Yo me declaro antagónico
a éste movimiento, creo que es destructivo, enajenante y tiene como
resultado el grave deterioro de la Moralidad y la Etica, que
padecemos actualmente. No que sea enemigo del sexo, por el
contrario, soy actualmente y siempre fui medio adicto al sexo, creo
que sin él, no podríamos vivir en más de un sentido. Recordemos
que el órgano sexual más elaborado e importante en el ser humano es
el cerebro. Como que Dios y la Naturaleza, al permitir que nuestra
actividad sexual, no fuera estrictamente gobernada por los instintos
animales, es decir, no “entramos en “calor” o “celo” sólo
cuando hay fecundidad como en la mayoría de las especies, designaron
que el instinto sexual debería ser gobernado por el cerebro y la
poca o mucha inteligencia que lleguemos a alcanzar. Sin embargo, hoy
en día, muchas personas, principalmente las mujeres, hacen hincapié
en mostrar sus atributos sexuales a toda hora y en cualquier
circunstancia, y así vemos a respetables señoras, a veces no tan
jóvenes, con “prole” y marido en rastras, lucir por todas
partes; escotes descarados, minifaldas, pantalones de “culo
asifixiado”, ¿Qué les pasa?,(a ellas y a sus sufridos cónyuges)?
¿A quién quieren hechizar encantar o inducir?... ¿Ya no hay
decencia, ni sentido común? . Como si fuera poco, ahora tenemos a
los varones; “metrosexuales”, cuates pagados de sí mismos, que
se creen muy atractivos y hacen hasta lo indecible para llamar la
atención. Yo creo que más bien son tipos “acomplejados”,
inseguros de su personalidad o inmaduros que sienten que lo único
valioso es el atractivo sexual. Recordemos lo que en una ocasión
dijo una iluminada dama; “El atractivo sexual mayor del hombre, es
un pequeño bulto en la bolsa trasera del pantalón”, (la cartera).
Por lo pronto, no tocaré expresamente
las importantísimas características de los “Estados
Intersexuales”, Homosexualidad, Transvestismo, Bisexualidad, y
demás desviaciones del instinto y desarrollo sexual humano, (que es
lo que en realidad son, ¡no nos hagamos tontos!), aunque prometo que
si Dios y ustedes me dan licencia, y me tienen paciencia, dedicaré
algunos renglones más adelante a este interesantísimo e importante
problema.
Muy interesante todo tu artículo y como dicen y dices: hormona mata neurona y cartera mata carita!! jajajaja
ResponderEliminarMe gustó eso de jóvenes de corazón y que todo está en la actitud que tengamos en la vida para permanecer jóvenes de corazón.
Sobre la forma de vestir de algunas mujeres y hombres metrosexuales creo que es por querer lucir y sentirse más jóvenes y en el intento parecen otra cosa. Hay que darles chance no?