CARTA ABIERTA A RICARDO ANAYA

CARTA ABIERTA A RICARDO ANAYA Estimado Ricardo. Soy un viejo Médico retirado, que no tiene otra ocupación que, la de escribir. Me dirijo a Ti, porque estoy convencido de que nuestro País, merece mejor liderazgo que el actual. Por lo tanto, nosotros los votantes, necesitamos elegir al mejor timonel del querido barco que llamamos México. Creo firmemente que tú, tienes las cualidades que nuestro País necesita. No conozco alguien mejor capacitado, con el perfil necesario de inteligencia, serenidad, y elocuencia, que el puesto requiere. Sin embargo, la imagen que proyectas es la del Chico estudioso y tranquilo (“El Nerd”) de la clase, que todos odiábamos cuando estábamos en la escuela. Mientras que el bravucón, el ingenioso, el procaz, el que inventaba excusas por no haber traído la tarea era el campeón admirado por todos. Estamos llenos de idiotas populares e ignorantes (Ya sabes a quién me refiero), tipos listos, audaces y muy ocurrentes que hacían reír a todos, para burlarse de los “Nerds”, del maestro o del que sacaba buenas calificaciones. Nuestro País necesita líderes inteligentes y creativos, que posean cualidades creativas y que tomen decisiones justas, mirando al futuro. El Chofer que conduce un vehículo, mirando por el espejo retrovisor casi siempre tiene un accidente. Necesitamos que nuestro chofer, posea cualidades de elevado nivel intelectual y muy importante: Una buena dosis de Inteligencia Emocional. Hace tiempo, yo leí un libro acerca de esa cualidad que hace al buen líder: “La Inteligencia Emocional”, escrita por un Psicólogo llamado Daniel Goleman, quien toca ésas cruciales características, que distinguen a los buenos líderes. El líder simpático y popular, casi siempre derrota al inteligente y creativo. El tonto, el procaz y el charlatán, el populista, casi siempre triunfan (otra vez Y S a Q m R). De modo que te aconsejo que: “Finjas demencia” y escondas tu brillantez, para lograr ser popular y triunfar en los Comicios. Te agradezco tu atención y te deseo suerte para enfrentar la difícil tarea que tienes por delante. Afectuosamente. Oscar Luis Cisneros, Guadalajara Jalisco, (24-04-22)