HOLA BETS & CHICKS. En el cuidado de la salud es de capital importancia el mantenimiento de nuestra capacidad cognoscitiva. Ahí les vá alguna información respecto a como nuestro órgano rector se actualiza
FISIOLOGÍA DEL SUEÑO
El sueño es un estado biológico presente en animales y en seres humanos que
se define en función de unas características comportamentales y fisiológicas.
Características comportamentales: durante el sueño existe una ausencia
o disminución de movimientos corporales voluntarios y se adopta una
postura estereotipada de descanso, distinta en cada especie animal. Antes
de dormir buscamos un lugar seguro y tranquilo adoptando una postura cómoda
que nos ayude a conciliar el sueño y un ambiente sin ruido.Además
existe una escasa respuesta a estímulos externos de baja intensidad que es
reversible (a diferencia del coma).
Características fisiológicas: en 1929 el psiquiatra Hans Berger desarrolla
el electroencefalograma (EEG), lo que permitió registrar la actividad eléctrica
cerebral sobre el cuero cabelludo y sus diversas variaciones431. La actividad
eléctrica cerebral se manifiesta en el trazado EEG, en el que se identifican 4 tipos
de ritmos biológicos, caracterizados por su frecuencia, topografía y reactividad:
ritmo alfa (8-13 Hz, localizado en regiones posteriores, durante la vigilia
tranquila y con los ojos cerrados), ritmo beta (más de 13 Hz, aparece en áreas
frontales y en vigilia activa), ondas theta (4-7,5 Hz) y ondas delta (≤ 3,5 Hz).
En 1937 Loomis y cols. observaron cambios típicos en la actividad eléctrica
cerebral durante el sueño y el incremento de la proporción de ondas
lentas a medida que el sueño se profundiza, lo que permitió establecer la
primera clasificación de las fases del sueño (estadios A, B, C, D y E)82.
En 1968, Rechtschaffen y Kales82 establecieron los criterios que facilitan
el estudio de los cambios de actividad eléctrica cerebral durante
el sueño y que, desde entonces, se han empleado en todos los laboratorios
de sueño del mundo hasta hace unos años. Mediante el registro de
las señales biológicas fundamentales (EEG, EMG y EoG) se pueden
identificar las fases de sueño y los episodios de vigilia. recientemente
estos criterios han sido revisados por comités de expertos de la AASM,
estableciendo unas recomendaciones que han sido publicadas en 200781.
142 GUÍAS DE PRÁCTICA CLÍNICA EN EL SNS
Existen dos tipos de sueño bien diferenciados: el sueño de movimientos
oculares rápidos, conocido como sueño rEM (rapid Eye Movement) o
sueño paradójico y el sueño de ondas lentas, también conocido como sueño
No-rEM (Non rapid Eye Movement), por contraposición al sueñorEM175.
El sueño de ondas lentas oNo-rEMestá constituido por las fasesN1(anteriormente
denominado “estadio 1-NrEM”), N2 (antes “estadio 2-NrEM”)
y N3 (anteriormente denominada fase 3 y 4 del sueñoNrEMo sueño profundo).
En este estado del sueño se observa ausencia de movimientos oculares rápidos,
quiescencia muscular y regularidad y lentitud del pulso y la respiración,
con reducción de la presión sanguínea y menor umbral de alertamiento que
el del sueño rEM. En el sueño NrEM también existen ensoñaciones, que se
describen en forma de “sensaciones agradables o desagradables”.
En la fase de sueño rEM se observan movimientos rápidos de los ojos
y de los pequeños músculos faciales.También es característico el incremento
e irregularidad en pulso, respiración y presión sanguínea. En el varón las
erecciones peneanas tienen relación con los episodios de sueño rEM. Este
estado se ha denominado “paradójico” porque en él se observa la máxima
relajación muscular y el máximo umbral de alertamiento con un sueño ligero
según criterios EEG (con una actividad cerebral similar a la vigilia activa).
Es en este período de sueño en el que aparecen las ensoñaciones más
“cinematográficas”, aunque a veces no es posible recordar su contenido.
En los primeros (tres) meses de vida se distinguen tres tipos de sueño:
sueño activo, equivalente al sueño rEM del niño mayor o adulto, sueño
tranquilo, equivalente al sueño NrEM del niño mayor o adulto y un tercer
tipo de sueño llamado sueño indeterminado que no cumple con las características
EEG del sueño activo ni del sueño tranquilo. En los neonatos, el
sueño activo ocupa hasta un 60% del sueño y precede el sueño tranquilo.
A partir de los 2 meses de edad ya se podría hablar de “sueño NrEM”
que, a esta edad, ocupa la mayor parte del sueño y precede al sueño rEM.El
sueño rEM, muy abundante en las primeras semanas de vida, disminuye a
lo largo de los años. En niños mayores, al inicio de la noche existe una mayor
proporción del sueño profundo (N3) mientras que el sueño rEM es mucho
más abundante en el transcurso de la segunda mitad de la noche. En preadolescentes se objetiva un retraso del inicio del sueño de forma fisiológica y,
años más tarde, en la adolescencia, el sueño profundo es menos abundante
que en los años previos.
En el transcurso de la noche, el niño presenta varios ciclos de sueño, es
decir, secuencias de sueño NrEM (sueño tranquilo en neonatos) y sueño
rEM (sueño activo en neonatos). En niños de más de 2-3 meses –cuando ya
podemos hablar de “sueño NrEM” y “sueño rEM”–, el ciclo de sueño se
vá asemejando al de la niñez y adolescencia.
Es conocida la importancia de el sueño natural en el desarrollo y función cerebral en la épocas tempranas d la vida, pero en el desempeño ulterior en la vida adulta existen discrepancias considerables. durante la distintas etapas del sueño se realizan diferentes acciones que podemos denominar restauradoras o de mantenimiento, que consisten en limpieza de radicales libres de los neurotransmisores que son substancias hormonales o enzimáticas que conectan las sinapsis entre las neuronas
(substancia gris) y los axones y dendritas (substancia blanca). Al restaurar la eficacia de la conexión entre las distintas áreas del cerebro sus funciones se realizan con mayor eficacia y velocidad.
El sueño más efectivo para estas funciones es el de ondas beta y theta, las más lentas, con episodios breves de ondas rápidas tipo alfa en las regiones parietales.
Este tipo de sueño requiere de un estado de tranquilidad y una casi ausencia de estímulos exteriores, sobre todo de tipo visual luminoso y acústico, de modo que nó es conveniente dormir con la televisión encendida o escuchando música o estímulos sensoriales intensos, o leer antes de dormir, excepto leer libros como los míos que dicen son adormecedores. El estado de relajación producida por los estados hipnóticos, o meditación profunda, también puede en algunos casos provocar tal efecto.
Es conocida la importancia de el sueño natural en el desarrollo y función cerebral en la épocas tempranas d la vida, pero en el desempeño ulterior en la vida adulta existen discrepancias considerables. durante la distintas etapas del sueño se realizan diferentes acciones que podemos denominar restauradoras o de mantenimiento, que consisten en limpieza de radicales libres de los neurotransmisores que son substancias hormonales o enzimáticas que conectan las sinapsis entre las neuronas
(substancia gris) y los axones y dendritas (substancia blanca). Al restaurar la eficacia de la conexión entre las distintas áreas del cerebro sus funciones se realizan con mayor eficacia y velocidad.
El sueño más efectivo para estas funciones es el de ondas beta y theta, las más lentas, con episodios breves de ondas rápidas tipo alfa en las regiones parietales.
Este tipo de sueño requiere de un estado de tranquilidad y una casi ausencia de estímulos exteriores, sobre todo de tipo visual luminoso y acústico, de modo que nó es conveniente dormir con la televisión encendida o escuchando música o estímulos sensoriales intensos, o leer antes de dormir, excepto leer libros como los míos que dicen son adormecedores. El estado de relajación producida por los estados hipnóticos, o meditación profunda, también puede en algunos casos provocar tal efecto.
Interesante,aunque un poco complicado.
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